Te propongo ponerle freno al ritmo de vida al que estás
subido.
Pasan las horas, los días y no podemos detenernos un
minuto reflexionar
sobre lo que pasa en nuestras vidas.
La rutina que llevamos no nos deja tiempo para hacer
cosas verdaderamente importantes.
Es necesario detenernos, buscar el momento y encontrarnos
con nosotros mismos.
Sal a caminar, apaga el móvil, quedate en silencio, busca
ese momento para pasar en soledad, escucha tu música preferida, termina de leer
aquel libro que tanto te gusta.
Esta vida no nos pone las cosas fáciles, pero porque no
luchar por las cosas que nos
hacen verdaderamente felices.